Con el traspaso que acabó con Thomas Robinson, Francisco García y Tyler Honeycutt en los Rockets, Sacrmento recibía a Toney Douglas, entre otros, con lo que su nómina de bases. Estaba claro que habían de reducir la cantidad de jugadores en esa posición y el elegido es Aaron Brooks.
En su única campaña con los Kings, Brooks no ha podido consolidarse y ha estado lejos de sus números en Houston, donde llegó a promediar casi 20 puntos en una temporada. De hecho, en California se ha visto superado por Isiah Thomas y apenas ha disputado 20 minutos por noche.
Recordemos que Brooks estuvo en China en la temporada anterior y su vuelta a la NBA no ha sido todo lo triunfal que esperaría. El base tenía un contrato de 6.6 millones de dólares en dos años y, con su marcha, los Kings aligeran el puesto de base, aunque quizá hayan elegido el nombre adecuado.
Los vencedores parece que van a ser los Rockets. Desde Texas se han movido muy bien en febrero y, si se consigue cerrar la llegada de Aaron Brooks, la plantilla daría un paso adelante, más aún si García y Robinson comienzan a adaptarse a la dinámica de Kevin McHale.
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